Cuidados
Guardar
En lugar fresco y seco, como las galletas, bien cerrado para que no cojan polvo.
Una bolsita de tela puede preservarlas del roce con otras joyas y protegerlas de la suciedad, aunque casi todas las piezas se pueden lavar.
Las piezas con partes de metal es recomendable guardarlas preservándolas de la humedad.
Limpiar
Seguir siempre las recomendaciones de la etiqueta. Los rodillos quitapelusa son ideales para eliminar los restos de fibras y polvo que pueden coger con el uso.
Un buen cepillo de ropa, apto para lana y prendas delicadas también funciona.
Las partes metálicas se pueden oxidar y oscurecer por el uso. Si este envejecimiento no te gusta, puedes limpiarla con los productos habituales para metales. En este caso puedes envolver las partes tejidas con una cinta adhesiva, la cinta de pintor es perfecta para esto, de esta forma evitarás que se manche con el producto y los restos de oxido del metal. Además, cuando retires la cinta adhesiva, se llevará pelusillas y suciedad que pueda haberse adherido al tejido.
Lavar
La mayoría de las piezas se pueden lavar en agua fría a mano o en la lavadora a 30º, pero algunas requieren limpieza en seco. Esta diferencia responde a las indicaciones del fabricante del hilo y a como está ejecutada la pieza. En algunos casos debido a los materiales que completan el diseño os recomiendo el lavado a mano en agua fría, o incluso en algún caso la limpieza en seco.
Las instrucciones de lavado están en la etiqueta de cada pieza, que te recomiendo conservar, por eso están diseñadas para que las conviertas en marca-libros y no te de pereza guardarlas.